• Ponentes en la FILU, hablaron sobre el tema “La nueva fábrica del cuerpo: tecnociencia y deporte”

Aspecto de la conferencia “La nueva fábrica del cuerpo: tecnociencia y deporte”.

Santiago Morales Ortiz

Los especialistas Juan Carlos García Mesa y Enrique Sánchez Ballesteros afirmaron que es necesario crear una nueva imagen del deporte, con base en una verdadera cultura física, durante su participación en la Feria Internacional del Libro Universitario (FILU) con el tema “La nueva fábrica del cuerpo: tecnociencia y deporte”.

En el Auditorio de la Facultad de Música de la Universidad Veracruzana (UV), acompañados por Gerardo Sifuentes, escritor de ciencia ficción que también destacó el papel de los llamados “súper atletas” y lo que implican en la sociedad, los ponentes hablaron de la importancia de analizar el problema social de la ciencia y tecnología en el deporte actual.

Como moderadora estuvo Maribel Barradas Landa, titular de la Dirección de Actividades Deportivas de la UV. De origen cubano e invitado especial en el evento, Juan Carlos García Mesa, egresado de la Facultad de Cultura Física “Manuel Fajardo”, destacó que “en el deporte, y desde el punto de vista sociológico y por salud, la ciencia de la tecnología es importante para el rendimiento deportivo, pero también hay que señalar los puntos negativos, porque no todo es color de rosa en este  ámbito”.

Señaló que en el ámbito de la cultura física se hacen estudios de los problemas de la ciencia y tecnología, que incluyen los aspectos sociales y la ética, los cuales juegan un papel significativo.

“Muchos deportistas, en su afán por obtener resultados favorables, atentan no sólo con su salud sino en el aspecto moral, inyectándose o tomando sustancias prohibidas.”

Destacó que preocupados por este fenómeno, “son muchos los países que trabajan fuerte sobre este tema de la ciencia y la tecnología en el deporte, donde México está incursionado mucho. Se pueden poner en práctica los elementos sociológicos y psicológicos para integrarlos a la actividad deportiva, sin necesidad de mucho recurso, pues lo que requiere es el empeño, con decisiones gubernamentales y políticas para que se pueda atacar el fenómeno”.

Asistentes al foro.

García Mesa apuntó que México muestra un gran avance en estos aspectos, “atraviesa todavía situaciones difíciles, pero no podemos comparar a todos los países, pues cada uno tiene su entorno particular a la hora de la práctica deportiva”.

Destacó como ejemplo a Estados Unidos, que apuesta mucho por los clubes particulares, con un amplio financiamiento, “pero el problema de México no está tanto en los recursos humanos, sino en lo social y en lo metodológico, en cuanto a la preparación de entrenadores, que puedan potencializar el desarrollo en todas las disciplinas”.

Señaló que debemos aprender a canalizar la actividad deportiva desde el punto de vista de la ciencia y la tecnología, con los avances e influencia que tienen, “pero considerando la actividad concreta y productiva que pueden conformar una o varias personas”.

Por su parte Enrique Sánchez Ballesteros, catedrático de la Facultad de Filosofía de la UV y Licenciado en Educación Física, apuntó que el impacto del desarrollo tecnológico y científico en el deporte “no sólo se enfoca en cuestiones del avance de la ciencia y cómo impacta en el desarrollo deportivo, sino también adentra al deporte como un fenómeno social y humano que tiene dimensiones éticas y estéticas, pues el deporte normalmente forma un arquetipo de lo que es el cuerpo sano y  su desempeño ético”.

Señaló que México en general “carece de una cultura física, no se da el deporte en todas sus dimensiones, hay un gran aparato mercadotécnico que es el deporte espectáculo, y que es observado como un paradigma de arquetipo a seguir. Eso de alguna manera desvirtúa en el ámbito del deporte escolar, formación y recreación, y ahí puede haber implicaciones desde afectar la salud de los niños hasta la enajenación fanática que mueve masas, como lo es el deporte espectáculo”.

Agregó que en la actualidad la cuestión corporal, a diferencia de lo espiritual, es una máquina, pues precisamente el cuerpo es concebido como una máquina que produce energía, movimientos y capacidades físicas, y la actividad deportiva tiene una serie de variables como la alimentación, técnica, táctica y psicológica.